A medio caballo entre la novela policíaca y la de terror, "Vudú" ha sido otra agradable sorpresa leída recientemente. Cuenta la historia de un detective privado(además de ex policía), que tras salir de prisión donde cumplió condena de 7 años por triple homicidio sin premeditación, se encuentra con que su esposa ha fallecido en accidente de tráfico. Con este desolador panorama a sus espaldas, le llega un peculiar encargo profesional, buscar al hijo pequeño de un multimillonario desaparecido dos años atrás, con una seria advertencia; sus predecesores tuvieron un destino peor que la muerte. La recompensa, 10 millones de dolares si hacía un milagro y traía al niño vivo, 5 millones si traía su cadáver y 5 más por los asesinos, cualquiera que fuera su estado.
Sin estropear la trama, podemos indicaros que además de dibujar perfectamente la extrema pobreza de Haití (extraordinaria la revisión que hace de una cultura adicta a lo sobrenatural), de relatarnos sus profundas creencias en el culto vudú (tanto blanco como negro, desde luego las figuras del Baron Samedi y especialmente de Tonton Clarinette merecen una revisión y un estudio más profundo), y de presentarnos las complicadas relaciones de los habitantes con los norteamericanos que ocuparon la isla, la misma acaba derivando hacia el tráfico de menores (en Haití los niños de piel muy blanca o muy oscura son considerados los mejores "cargadores" para la práctica de su magia negra), y a la forma en que se crean los "zombies". Misterio y desasosiego a partes iguales en una novela tremenda, que se va oscureciendo más y más conforme avanza para un final aterrador. Un 11 sobre 10, y nuestra más sincera recomendación de lectura
Sin estropear la trama, podemos indicaros que además de dibujar perfectamente la extrema pobreza de Haití (extraordinaria la revisión que hace de una cultura adicta a lo sobrenatural), de relatarnos sus profundas creencias en el culto vudú (tanto blanco como negro, desde luego las figuras del Baron Samedi y especialmente de Tonton Clarinette merecen una revisión y un estudio más profundo), y de presentarnos las complicadas relaciones de los habitantes con los norteamericanos que ocuparon la isla, la misma acaba derivando hacia el tráfico de menores (en Haití los niños de piel muy blanca o muy oscura son considerados los mejores "cargadores" para la práctica de su magia negra), y a la forma en que se crean los "zombies". Misterio y desasosiego a partes iguales en una novela tremenda, que se va oscureciendo más y más conforme avanza para un final aterrador. Un 11 sobre 10, y nuestra más sincera recomendación de lectura
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